Sus cualidades nutricionales y sus beneficios para la salud las convierten en un alimento muy recomendado que contribuye a prevenir la obesidad y las enfermedades no transmisibles.
Además, su excelente relación calidad-precio hace posible aumentar su consumo en toda la población, con especial atención a los colectivos más desfavorecidos.
Existe una relación entre hábitos alimentarios y nivel de renta: a medida que aumenta el nivel de ingresos del hogar, los escolares tienen hábitos alimentarios más saludables. Las legumbres son un grupo de alimentos que por sus características nutricionales y su asequibilidad, pueden contribuir a mejorar la dieta de toda la población.
El consumo de legumbres contribuye de ese modo a llevar a cabo una dieta más sana sin causar mayores perjuicios a la economía de las familias, y a través de una alimentación tradicional, basada en costumbres antiguas que conjugan la salud y el disfrute culinario.
Las legumbres, además, contribuyen a la sostenibilidad y a mitigar el cambio climático, debido a que fijan el nitrógeno al suelo donde se cultivan y una vez recolectadas no necesitan de procesado ni de refrigeración para su conservación por lo que disminuye el consumo de recursos.
Incluye cinco piezas de frutas y verduras en vuestra dieta