Gracias al consumo de fruta y verdura podemos prevenir todo tipo de problemas y enfermedades, entre las que se encuentran distintos tipos de cáncer. Y si además decidimos centrar nuestra alimentación en estos productos, ese estrés que generamos y padecemos cada día, acabará por desaparecer. Sobre todo, si entre las piezas de fruta que tomamos cada día destacan aquellas que aportan vitamina C a nuestro organismo como: melón, naranja, piña o mandarina.
Esto es lo que ha concluido un estudio desarrollado en Australia, después de basarse en el consumo diario de personas de más de 45 años.
Porque aquellos que tomaban entre tres y cuatro piezas de fruta diarias, veían sus niveles de estrés reducidos hasta un 12%. Al mismo tiempo, se observó que las mujeres que contaban en su alimentación diaria con hasta cinco o siete piezas de fruta y verdura, reducían el riesgo de estrés un 23%.
En este último caso, si ves que no vas a llegar a esas siete frutas diarias, no te preocupes. Porque tan solo añadiendo a nuestra dieta dos piezas distintas, veremos una reducción del 16% del riesgo de sufrir estrés.