La investigación ha sido publicada en la revista ‘JACC CardioOncology’ y explicaba que las personas que han sido diagnosticadas con cualquier tipo de tumor que mantenían una dieta mediterránea de forma habitual en el año anterior de inscribirse al estudio viven más y tienen un menor riesgo de mortalidad cardiovascular en comparación a los que no seguían esta dieta.
Marialaura Bonaccio, primera autora del estudio, ha comentado que se conocen los beneficios de esta dieta a la hora de prevenir algunos tumores, pero no se había estudiado tanto los beneficios que puede tener en personas que ya han sido diagnosticadas con el tumor, por ello, el estudio examinó a 800 adultos italianos, tanto hombres como mujeres, que ya habían sido diagnosticados con cáncer. Se siguió el consumo de alimentos de los participantes a lo largo de más de 13 años.
Bonaccio ha explicado que el beneficio de esta dieta fue "especialmente evidente" en la mortalidad cardiovascular, con una reducción del 60%.
Además, Maria Benedetta Donati, investigadora principal de la Plataforma Conjunta de Investigación Fundación Umberto Veronesi, considera que estos datos tienen también interés en cuanto a que respaldan una hipótesis "interesante". Dicha hipótesis sostiene que diferentes enfermedades crónicas, como los tumores y las enfermedades cardíacas, comparten los mismos mecanismos moleculares.
Chiara Tonelli, presidenta del Comité Científico de la Fundación Umberto Veronesi, ha explicado los alimento que componen principalmente la dieta mediterránea: frutas, verduras y aceite de oliva, que son fuentes naturales de compuestos antioxidantes. Para Tonelli esto podría explicar la ventaja en términos de mortalidad no solo por cáncer, sino también por enfermedades cardiovasculares, que se reduce con dietas ricas en compuestos bioactivos.