La cantidad total acumulada se destinará a proteger a los más de 700.000 trabajadores de los centros sanitarios, tanto públicos como privados, y residencias de mayores que trabajan en la lucha contra el COVID-19. El seguro de vida colectivo, que tendrá cobertura retroactiva al 14 de marzo, cubrirá el fallecimiento de quienes cuidan de la salud de todos los ciudadanos en la presente crisis sanitaria, así como un subsidio para los que resulten hospitalizados.
La participación de Grupo Mutua en esta iniciativa se suma a las acciones ya adoptadas al comienzo de esta crisis. Cuando, a través de la Fundación Mutua Madrileña, se hizo cargo de la compra de mascarillas para los servicios de atención domiciliaria a personas mayores del Ayuntamiento de Madrid, test rápidos de Covid-19 para los servicios de salud municipales.
Además, también financió, con carácter urgente, un primer estudio de investigación médica sobre el Covid-19 en el Instituto de Investigación del Hospital Universitario La Paz.
Junto a esto, el Grupo ha abierto dos convocatorias extraordinarias de ayudas, para apoyar a colectivos vulnerables afectados por la crisis y para financiar proyectos de investigación médica sobre el coronavirus, dotadas con 500.000 euros. Así como mediante la dotación de ayudas para luchar contra el aislamiento de las familias de todos los mayores que viven en residencias, y para la compra de material sanitario destinado a estas residencias. Todo ello, por importe de otros 200.000 euros.
Por otro lado, la Fundación Mutua Madrileña ha puesto en marcha la compra de 1.300 tablets destinadas a paliar el aislamiento de los mayores que viven en residencias de la tercera edad.
También, contribuirá económicamente a la compra de material sanitario para las residencias que Cáritas gestiona en toda España. Esta aportación se realizará a través de Mutuafondo Compromiso Social, el fondo solidario que ha lanzado Mutuactivos, la gestora de patrimonios de Grupo Mutua, para captar fondos con el mismo fin.