Carmen Calvo, vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad ha condenado este último "asesinato machista" en un mensaje en su perfil de Twitter. También lo ha hecho el presidente del Gobierno, que en esta red social ha señalado que la unidad "es la única vía para acabar con esta lacra". "No podemos permitir que haya Ni Una Menos. Mi apoyo y solidaridad con la familia y amigos de la mujer asesinada en Cabana de Bergantiños, A Coruña", ha escrito Pedro Sánchez.
El presunto asesino, un varón de 56 años, fue detenido este domingo por supuestamente disparar a su mujer de unos 50 años en la cabeza y ahora está a la espera de pasar a disposición judicial. En este caso --que eleva a tres las mujeres asesinadas en Galicia este año--, el matrimonio estaba en trámites de separación y no constan denuncias previas por malos tratos en la pareja.
"950 asesinadas desde que hay datos, 26 este año, y aún hay quien cuestiona la urgencia del Pacto de Estado contra la Violencia de Género. No se hace política con tragedias: No pararemos hasta que no se repita. Nunca más, Ni una más", ha escrito la número dos del Gobierno en la red social.
En este mensaje, Calvo ha aprovechado para afear a los 'populares' sus críticas al Real Decreto-ley 9/2018 recientemente aprobado por el Ejecutivo sobre medidas urgentes para el desarrollo del Pacto de Estado contra la Violencia de Género.
Según el PP, este decreto ley "adolece de graves defectos jurídicos que son constitutivos de inconstitucionalidad"; sin embargo, desde el Ministerio de Igualdad han insistido en que es "jurídicamente correcto".
Solo denunciaron cinco mujeres
Del total de asesinadas en lo que va de 2018, sólo cinco habían presentado denuncia previa contra su agresor, aunque dos de ellas decidieron no continuar con el procedimiento, según los datos oficiales actualizados a fecha 20 de agosto. En cuatro de los cinco casos con denuncia se adoptaron medidas de protección, y en tres de ellos estaban en vigor.
Del total, 18 mujeres eran de nacionalidad española y ocho extranjeras; 17 fueron asesinadas por sus parejas y nueve por sus exparejas o estaban en fase de ruptura. En 15 de los casos, las víctimas todavía convivían con el agresor.
La mayoría de las víctimas (12) tenían entre 41 y 50 años; otras cinco entre 31 y 40; dos entre 21 y 30; otras dos entre 51 y 60; otras dos tenían entre 71 y 84 años; otra entre 61 y 70 años, otra mujer tenía más de 85 años, y otra de 18 a 20 años.
Siete de las víctimas se registraron en Andalucía; tres en Cataluña; tres en Galicia; dos en Castilla-La Mancha; dos en Asturias, dos en Castilla y León; otras dos en la Comunidad de Madrid y otras dos en Canarias. Otra fue asesinada en el País Vasco, otra en la Región de Murcia y otra en Aragón.
Actualmente hay un caso en investigación, que se corresponde con el de la mujer de la Orotava (Tenerife) y sus dos hijas menores de edad, que aparecieron muertas, mientras que el presunto autor de los tres crímenes murió ahorcado.