La espalda es una de las partes de nuestro cuerpo de las que, en general, menos solemos preocuparnos. Debido a esto, en ocasiones podemos llegar a cargarla demasiado, o llevamos a cabo sobreesfuerzos que podríamos evitar y que en el futuro pueden llegar a suponer todo tipo de problemas y dolores.
La mejor forma de mantener la salud de nuestra espalda se centra vigilar nuestra postura; ya sea cuando estemos sentados, en cuyo caso es recomendable mantener una postura erguida; como al andar o al estar de pie.
Pero además, los expertos recomiendan también vigilar la postura de nuestra espalda cuando nos acostamos. En este caso también es recomendable evitar colchones demasiado duros, o demasiado blandos.
Por otra parte, debemos huir de movimientos repetitivos, ya que pueden sobrecargar una zona en concreto y dejarla dolorida. A este respecto también cabe añadir que si vamos a levantar cualquier peso, nunca lo hagamos con la espalda. En lugar de eso, lo mejor es flexionar las rodillas y no doblar nuestra espalda.
Por último, en caso de que ya suframos este tipo de dolores y dificultades, se recomienda evitar un reposo absoluto en cama, así como llevar a cabo terapias de calor o masajes, si se trata de un dolor muscular.