Seguir una dieta inadecuada y tener hábitos alimenticios inapropiados puede suponer el origen de diferentes problemas y trastornos del sueño. Dormir bien es muy importante para la salud y sobre todo, los niños deben tener un sueño totalmente reparador.
Por eso, aquí tienes diez consejos para ayudar a lo más pequeños a descansar bien y conciliar pronto el sueño.
1. Ofrécele cenas suaves, dando más importancia al desayuno y la comida.
2. Los excesos nunca son buenos. Una cena muy abundante dificultará el inicio y mantenimiento del sueño, mientras que acostarse con el estómago vacío hará que se despierte por el hambre.
3. Los platos especiados aumentan la temperatura corporal, por lo que cuesta más dormir. Mejor descartarlos a la hora de la cena.
4. Las patatas, la calabaza, el arroz, la pasta, etc, son beneficiosos contra los problemas de sueño. Pero tampoco debemos abusar de ellos.
5. La leche, el pescado y los plátanos contienen triptófano, muy implicado en la regulación del ciclo del sueño.
6. No debemos meternos en cama justo después de cenar. Reposar un poquito siempre ayuda a acostarse con más ganas.
7. Los alimentos ricos en azúcar provocan sonmolencia. Mejor evitarlos.
8. Procura que el niño no tome refrescos cuando se acerque la hora de la cena, muchos tienen cafeína o teína.
9. Entre los alimentos que favorecen el sueño podemos destacar: la patata, el arroz, la soja, los guisantes y el tomate.
10. La combinación de leche y cereales es muy aconsejable para tomar antes de dormir. ¿Por qué no tomarla de cena?