Algunas de las hormonas conocidas como hormonas de la felicidad son las siguientes: Las endorfinas, la dopamina, la serotonina o la oxitocina (la hormona del amor). Cada una de ellas genera sensaciones positivas, aunque no por ello son mejores que otras hormonas. Todas las hormonas son importantes y por ello es necesario que exista un equilibrio. Además, la necesidad constante de generar hormonas "positivas" es lo que genera las adicciones.
La felicidad por el deporte y la comida
Mediante el deporte podemos conseguir generar algunas de estas hormonas, como la dopamina o las endorfinas. La dopamina es una hormona que nos genera un placer inmediato, y reacciones positivamente a la actividad física, aunque se puede obtener también de otras maneras como escuchando música, logrando nuestros objetivos o comiendo alimentos con tirosina. Algunos ejemplo de alimentos con tirosina son: El plátano, los lácteos, el aguacate o las almendras.
Las endorfinas por su parte actúan como un analgésico, es decir, disminuye el malestar físico y mental. Para conseguir segregar esta hormona, aparte de por el deporte, se puede conseguir cantando, meditando o comiendo picante o un poco de chocolate.
Existe otra hormona que se activa mediante la comida, la serotonina. Esta hormona se genera en un 90% en el estómago y se encarga de regular la sensación de saciedad, la temperatura corporal e interviene en el proceso de deseo sexual. Por ello la forma más fácil de activarla es comiendo alimentos ricos en triptófano, como pueden ser el pescado, los frutos secos, el huevo o los lácteos. Aunque esta hormona también se puede activar mediante el deporte, tomando el sol (fuente de vitamina D) o evitando el estrés.
La hormona del amor
La oxitocina (la hormona del amor), tiene entre sus virtudes la capacidad de crear vínculos y anular el estrés. Para poder generar esta hormona se puede abrazar a los seres queridos, pasar tiempo con las mascotas, comer chocolate, hacer vida social o hacer el amor.
Esta hormona tiene un papel fundamentalen la vida de las mujeres, ya que, durante el parto ayuda a que se generen las contracciones uterinas y durante la lactancia ayuda a la producción de leche. Aunque la oxitocina también tiene importancia en la vida del hombre, que segrega esta hormona al eyacular.