El compromiso de Javier Bardem en favor del continente helado comenzó hace tiempo y a comienzos de año se sumergió en las profundidades del océano Antártico para apoyar la creación allí de la que será la mayor área marina protegida del mundo.
El actor español, que viajó a la zona en el legendario buque Arctic Sunrise de Greenpeace y bajó en un submarino a 270 metros, recordó de su experiencia que al llegar al fondo marino se sitió abrumado "por la increíble variedad de colores y de vida" que les rodeaba".
En su recorrido por el mundo para ampliar la protección de la Antártida, el actor también recaló en Berlín en febrero, donde junto a Greenpeace presentó los primeros resultados de las expediciones submarinas realizadas en la zona, que muestran la diversidad de su vulnerable ecosistema.
El viaje de Bardem a la Antártida también se tradujo en un documental con las imágenes grabadas durante siete días y las inmersiones realizadas que forma parte de la campaña internacional de Greenpeace, que aportará todos los datos recogidos a la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (CCAMLR, en inglés).
Ahora, Bardem no ha dudado en reunirse en Londres con Michael Gove para hablar sobre la creación de este Santuario en aguas de la Antártida. En un breve mensaje en sus cuentas de Twitter e Instagram, ha compartido que se está logrando "fraguar el momento político perfecto para proteger la Antártida".
Su mensaje en inglés y español acompaña una divertida imagen en la que el actor aparece conversando con una figura de un pingüino, el animal símbolo de la campaña, en la sede del ministerio.