La profesora de la Universidad estatal de Michigan (Estados Unidos), Sieg Snap, ha señalado en una conferencia en Roma, la existencia de las llamadas "legumbres multiusos".
Estos vegetales pueden ayudar a los suelos a adaptarse y mejorar su fertilidad y así poder alimentar a la población en zonas que sufren los efectos del cambio climático.
Además, también se pueden emplear en suelos que sufren las presiones de una población creciente, con agotamiento en los cultivos y cambios ambientales bruscos en forma de sequías o inundaciones.
Así, por ejemplo, en Congo o Camerún, utilizan legumbres como las judías trepadoras que aumentan la rentabilidad de los cultivos y se adaptan a áreas con altas temperaturas y mucha humedad. Por otro lado, Uganda Y Kenia están adoptando técnicas con alubias para evitar suelos pobres.
La experta estadounidense confía en que los agricultores promuevan estas prácticas, determinen qué variedades son las más adecuadas en cada caso y puedan invertir en investigación.