Un nuevo estudio de la Universidad de Texas en Austin, Estados Unidos, ha desvelado que en el verano los niños son más propensos a adquirir peso que a lo largo del curso escolar, lo que trae consigo problemas como el sobrepeso o la obesidad infantil.

En la investigación, publicada en la revista 'Obesity', participaron unos 18.000 escolares en los que observaron cómo desde el inicio del primer año de guardería hasta el final del segundo, la prevalencia de obesidad aumento del 8,9 al 11,5%.

Pero, sin embargo, esto no tenía ninguna relación con la época escolar sino que se debía a un aumento de peso en los peques durante las vacaciones de verano.

Los expertos han declarado que esto es provocado, sobre todo, porque en verano hay una mayor prevalencia de factores que causan la obesidad, al contrario que durante la época escolar.

En esta época, los niños duermen menos, cambian sus rutinas alimentarias y realizan menos ejercicio físico que a lo largo del curso.