Asimismo, y aunque el lavado de manos figura como pauta preventiva esencial para evitar la propagación de infinidad de enfermedades infecciosas no fue hasta alerta sanitaria mundial ocasionada por la denominada Gripe A cuando verdaderamente tomamos conciencia de la importancia de tener las manos limpias y de lavarlas antes de manipular alimentos, después de ir al baño, antes de comer… o cuando hemos manipulado objetos cotidianos como las llaves, el dinero, pomos de puertas…
Agua y jabón o gel hidroalcohólico
La recomendación general para la higiene de manos es lavarse las manos con agua tibia y jabón. Sin embargo, no siempre es posible recurrir a este recurso, en cuyo caso disponemos de una gran cantidad de geles o lociones limpiadoras que no requieren jabón y que conviene llevar encima para asearnos las manos cuando estemos fuera de casa y no dispongamos de agua corriente y jabón.
Si además de limpieza queremos una desinfecciónde la piel lo más seguro es recurrir a geles hidroalcohólicos antisépticos o productos similares con agentes químicos con capacidad de eliminar los microorganismos potencialmente dañinos para nuestra salud.
Estos productos han cobrado un gran protagonismo en el mercado debido a la actual pandemia por el virus SARS-CoV-2. Además de la conveniencia de llevarlos encima para usarlos cada vez que sea necesario, están instalados en la mayoría de superficies comerciales y lugares públicos con gran afluencia de personas para que sean usados antes de entrar en el recinto o cada vez que el usuario lo requiera.
No obstante, las autoridades sanitarias también advierten de que no todos los geles hidroalcohólicos son iguales y que según el fin que persigamos con su uso tendremos que fijarnos especialmente en el etiquetado antes de adquirirlo para saber si estamos ante un producto biocida o un producto cosmético.
Geles hidroalcohólicos biocidas o cosméticos
Los geles cosméticos únicamente están formulados, básicamente, para asegurar la limpieza de la piel. Para su fabricación, han de cumplir la normativa vigente y pasar por una serie de controles que demuestren su seguridad para uso humano y su eficacia en superficies corporales como la piel, los dientes y las mucosas bucales, a la hora de “limpiarlos, perfumarlos, modificar su aspecto y/o corregir los olores corporales y/o protegerlos o mantenerlos en buen estado”, tal y como reza el reglamento sobre productos cosméticos.
Por lo tanto, no podemos corroborar que tengan efecto a la hora de neutralizar virus o bacterias, ya que están concebidos “con el fin exclusivo o principal” de eliminar suciedad y mejorar la higiene de la piel.
Por su parte, los geles biocidas están pensados y desarrollados para llevar a cabo la desinfección de manos “con fines de control de los organismos nocivos para la salud humano o animal y de control de los organismos dañinos para los materiales naturales o manufacturados”, según refleja el reglamento sobre biocidas. Es decir, que su función es eliminar la presencia de bacterias, virus y otros patógenos potencialmente dañinos para nuestro organismo.
En cualquier caso, si lo que pretendemos es que el producto que apliquemos en nuestras manos tenga actividad frente a los virus similares al SARS-CoV-2 (causante de la COVID19) hemos de fijarnos en el etiquetado del producto para comprobar si es un biocida o un cosmético.
Pero, además, habremos de tener en cuenta la proporción de alcohol que contengan en su formulación ya que, según las investigaciones avaladas por las autoridades sanitarias europeas, para garantizar la eficacia frente a este microorganismo, el producto debe llevar una concentración de alcohol que oscile entre el 70% y el 90%. Además, hemos de usarlo de manera correcta asegurándonos de que el gel está sobre la piel al menos durante 20-30 segundos y llega a toda la superficie de las manos.
Si quieres conocer más sobre la técnica para desinfectar las manos de una manera correcta con un gel desinfectante, no te pierdas este vídeo: