Una reducción de la ingesta calórica diaria de alrededor de unas 300 calorías supondrá una importante mejora del organismo. Como confirma un nuevo estudio, eliminar de la dieta diaria una cantidad calórica equivalente a cinco o seis galletas se traduciría en una mejora de los niveles de colesterol, de la presión arterial, y de otros indicadores como el azúcar en sangre.
Las conclusiones de este estudio se basan en un grupo de más de 200 adultos menores de 50 años que presentaban un peso saludable. Sin embargo, pese a que los investigadores han centrado sus resultados en la pérdida de peso, se ha demostrado que esta no sería la única variable que explicaría una enorme mejora en la salud.
Por el contrario, y aunque los autores del estudio continúan su investigación, estos positivos cambios en el metabolismo podrían explicarse gracias a una pérdida superior a las calorías que se ingieren.
Para llevar a cabo el estudio, los participantes redujeron una cuarta parte de sus calorías diarias durante el primer mes; una condición que durante los dos años siguientes se traduciría en una eliminación del 25% de la ingesta calórica de sus dietas. No obstante, en la mayoría de los casos esta ingesta se redujo una media de un 12%.
De esta forma se ha podido ver que estas nuevas dietas supondrían una pérdida del 10% del peso, de lo que, al menos un 70%, era grasa. Así, los responsables de la investigación observaron que pasado este tiempo se producía una enorme mejora de los marcadores que miden el riesgo de enfermedades metabólicas, de corazón, o de enfermedades relacionadas con distintos tipos de cáncer y de deterioro cognitivo.