Una investigación dirigida por Jeffrey Gordon, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis, Estados Unidos, y publicado en la revista 'Cell', ha detectado componentes en la leche materna que ayudan al creciemiento de un lactante sano. Destaca además que la interacción de estos componentes con las bacterias del intestino impulsan un creciemiento adecuado.
La desnutrición infantil causa más de 3 millones de muertes cada año. El hambre supone un retraso en el crecimiento, así como déficits en el desarrollo inmunológico y cognitivo. Gracias a la colaboración con otros investigadores en Malawi, África, (donde casi la mitad de los niños menores de cinco años muestran retraso en el crecimiento), el equipo de Gordon pudo conseguir pequeñas muestras de leche materna, tanto de bebés sanos como de bebés con retraso en el creciemiento.
Los expertos detectaron que los azúcares que contienen ácido siálico, que promueve el desarrollo del cerebro, eran mucho más abundantes en la leche materna de madres con niños sanos en comparación con los bebés con retraso del crecimiento. Esto sugiere que estos azúcares de la leche materna podrían promover el crecimiento del lactante sano.