La mitad de las lesiones que sufren quienes practican esquí se producen entre principiantes, y las rodillas suelen ser las articulaciones más afectadas. Además, se calcula que cada día se produce una media de tres deportistas accidentados por cada mil esquiadores, lo que supone entre 45 y 60 afectados en estaciones muy concurridas

1. Utilizar un equipo adecuado

Los esquís deben de estar adaptados a nuestra talla y a nuestro nivel técnico, siendo fundamental que las ataduras estén asimismo bien ajustadas al peso y al tipo de esquí que vamos a practicar.

Diferentes modelos de esquís
Diferentes modelos de esquís | Pexels

2. Realizar ejercicios de calentamiento

Es aconsejable realizar ejercicios de calentamiento suave antes de la entrada a pista durante 10 o 15 minutos, así como respetar las normas y ceder el paso a aquellos con menos habilidad.

Ejercicios para mejorar la flexibilidad
Ejercicios para mejorar la flexibilidad | iStock

3. Evitar el cansancio

Es muy importante prestar atención al cansancio, se recomienda 'no esquiar durante más de cuatro horas seguidas'.

Esquiar
Esquiar | Pixabay

4. Elegir la pista

Según la experiencia del esquiador, así como, esquiar en pistas preparadas y señalizadas para evitar posibles accidentes.

Apertura de pistas de esquí
Apertura de pistas de esquí | Pixabay

5. Uso del casco

Es necesario insistir y ser consciente del uso del casco para todos los esquiadores, especialmente debe hacer uso de ellos los niños.

Casco de esquí
Casco de esquí | Pexels

Lesiones más frecuentes

Las lesiones más frecuentes se producen en esquiadores principiantes, con casi el 50% de todas las que se producen. Existen dos grupos con elevado riesgo de lesión: por un lado, el practicante muy joven que sin la experiencia necesaria que se lanza por recorridos difíciles y a velocidades muy altas; y, por otro, la persona desentrenada, que no practica deporte en todo el año, y que comienza la temporada de esquí sin la preparación física necesaria.

Por todo ello, los expertos aconsejan seguir la “regla de los treses” para el esquiador ocasional sin buen estado físico: "No esquiar más de tres horas, más de tres días seguidos o después de las 3 p.m.”.

Las rodillas son las articulaciones que más sufren en este deporte, con un 40% de las lesiones, que van desde el esguince a la rotura de ligamento lateral interno y ligamento cruzado anterior. En los casos más graves pueden verse implicados varios ligamentos o afectar simultáneamente a los meniscos, por lo que el tratamiento pasa por la intervención quirúrgica en todas las personas jóvenes y deportistas.

En el caso de la modalidad de ‘snow-board’, las lesiones suelen afectar a los miembros superiores que se apoyan sobre la nieve en el momento de la caída, y son más frecuentes las fracturas de muñeca y las lesiones del hombro.

Un estudio realizado por Universidad de West Virginia, destaca que un 59,7% de los deportistas reconoció ser responsable de su lesión, al afirmar que ésta no se habría producido si hubieran adoptado una actitud más prudente como bajar a menor velocidad, asumir menos riesgos o no poner en práctica una técnica que no dominaban.