El autor de 'Los bulos de la nutrición', Miguel Herrero, nos explica que hay tantos bulos sobre la alimentación porque, al tener comida de sobra, nos preocupamos por otras cosas como la salud o la calidad nutritiva de los alimentos. Por eso, empieza un proceso de aprendizaje sobre la alimentación que deriva en la creación y la creencia de los bulos.

El escritor nombra en su libro alimentos que tienen un perfil nutricional bajo pero que son muy consumidos, como el aceite de coco. Un alimento cuyo consumo ha aumentado y que se utiliza para sustituir al aceite de palma. Sin embargo, tiene un porcentaje de grasas saturadas más alto que el aceite de palma, por lo que no es más saludable.

Por otra parte, nos habla sobre los alimentos transgénicos. Estos pueden ser dañinos para el medio ambiente, dado que al estar modificados son más resistentes a plagas y pueden sustituir a las plantas y cultivos tradicionales. En Europa se hace menos uso de estos alimentos, en comparación con otras partes del mundo. Por lo que, la evolución en el uso de este tipo de cultivo y alimento, es probable que este enfocada a las técnicas de edición genética: "a cualquier niño le gusta la sandía sin pepitas, mucho más que con pepitas", explica Herrero. Se trata de productos seleccionados genéticamente.

Desde la perspectiva de la crisis climática, el autor explica que el desarrollo tecnológico y el conocimiento científico es esperanzador. Hacer uso de la tecnología para mejorar la calidad de los alimentos, asegurándonos de que son beneficiosos para la salud. Esto permite avances como el descubrimiento de nuevas fuentes de proteínas, avances en la producción de cultivos o mejorar la alimentación de las vacas para que produzcan menos metano, que es altamente contaminante.

Todo ello esta relacionado con el medio ambiente y con el avance científico y tecnológico. Por lo que, con el paso del tiempo se irán implementando mejoras que servirán de alternativa a problemas medioambientales.