A lo largo de 2018 se han recogido más de 80 toneladas de residuos y basura, para su eliminación, por toda la geografía española. Aunque esta contaminación está compuesta por todo tipo de elementos, hay algunos que destacan por encima del resto, y que, además suponen un problema añadido para el medio ambiente, por los compuestos químicos que presentan. A través de movilizaciones como ‘1M2 por la Naturaleza’ se busca convocar al mayor número de voluntarios posible para recorrer distintos puntos de nuestro país, y limpiar de basura estos espacios naturales. Entre los contaminantes más comunes se encuentran las toallitas húmedas, las colillas y los envoltorios plásticos, siendo, estos últimos, uno de los productos más contaminantes para el medio ambiente, debido a la acumulación del plástico en entornos naturales y a la dificultad que existe para su completa eliminación. No obstante, también es necesario destacar el grave peligro para la biodiversidad que suponen las colillas. Por una parte, un cigarrillo mal apagado puede ser responsable directo de un incendio forestal. Pero además, por otra, este elemento puede tardar hasta 10 años en degradarse y desaparecer. Y durante este tiempo, las sustancias tóxicas de los cigarrillos pasan a filtrarse al suelo.