El informe destacaba el impacto ambiental que puede generar la recarga de los patinetes eléctricos de alquiler. Su recarga la realizan trabajadores por cuenta ajena, que por las noches usan sus coches particulares para buscar los patinetes y llevarlos a sus casas para recargarlos. Los expertos señalan que los patinetes eléctricos de alquiler son usados por personas que antes iban a pie o utilizaban el transporte público, por lo que los usuarios del coche siguen siendo los mismos y no supone una reducción en la contaminación en las grandes ciudades.