Por ejemplo, ya hay esquíes de pasta de bambú y tablas de surf de soja 100% respetables con el medio ambiente. También existen actividades que nos ponen en contacto directo con la naturaleza y que hacen que nos concienciemos de cuidar el entorno natural. Actividades tales como la escalada, el senderismo o el descenso de barrancos son cada vez más practicadas. Otro claro ejemplo de recuperación de las zonas naturales es la reutilización de los tramos abandonados de raíles ferroviarios para convertirlos en vías verdes, perfectas para hacer senderismo o hacer rutas en bicicleta. Pero no solo los deportes en medio de la naturaleza respetan su cuidado. Los deportes de masas, como el fútbol también se preocupan del respeto por el medio ambiente. Algunos estadios ya iluminan sus partidos con leds y energía solar.