Lucía nos cuenta que está empezando a introducir muchos criterios de sostenibilidad, pero todavía considera que necesita hacer más para poder decir que hace moda sostenible. Quiere hacer una gestión más eficiente de sus residuos y compensar su huella de carbón. Además, busca incentivar el alquiler de piezas. Su reto es poder hacer sus piezas más sostenibles y lo hace transformando sus materiales como las flores o montando la corona en pequeñas partes para que después se puedan desmontar y reutilizar como broches o tocados. Para que esto sea posible, diseñan las piezas individuales y las unen en una corona o diadema. El valor de estos productos son la labor artesanal y su valor sostenible.