Esta semana en Hazte Eco, visitamos Biolab ETSIDI, Cristina Alía, investigadora del laboratorio, nos comenta los procesos necesarios para conseguir biocuero a partir de las raíces de las setas. Para ello han desarrollado una sala de cultivo dónde pueden controlar la temperatura y humedad con los dispositivos electrónicos de la propia instalación.
El biocuero se elabora con el micelio, que son las raíces de las propias setas. El proceso parte de administrar sustratos a las setas adquiridas para que sus raíces vayan creciendo.
Tipos de sustratos y elaboración
Los tipos de sustratos con los que realizan este proceso, y que más 'gustan a las setas' se dividen en líquidos y sólidos. Los sólidos más habituales son el serrín, la paja o el arroz inflado. Y por otro lado, el sustrato líquido que más se usa es la malta.
Una vez que le administran sustrato al micelio ya sea líquido o sólido, comienza su desarrollo, que suele durar de una a dos semanas o incluso más. Posteriormente lo cambian de molde para que termine de colonizar.
Si la muestra consigue desarrollarse de manera correcta y no se contamina ya tenemos el biocuero con el que elaboraremos posteriormente productos como cascos de bici o embalajes.
Biocuero de fibra de banano
Otro campo de estudio que están desarrollando en Biolab ETSIDI es la obtención de biocuero a partir del banano. Este estudio da como resultado un material que no se contamina, además, se obtiene en un tiempo mucho más corto, en cinco horas disponen de este biocuero, el sustrato que se utiliza en este caso para su elaboración es la gelatina.
El material obtenido se puede coser, es impermeable, lavable y moldeable. En la actualidad están desarrollando fundas para móvil, un elemento que se cambia de manera habitual en nuestra sociedad.