Estas tendencias serán un hito para las compañías, quienes podrán anticiparse a los futuros retos y estar atentas y actualizadas respecto a las nuevas temáticas que aceleran la transformación sostenible.
Consolidación de la apuesta por parte de los mercados por los activos sostenibles
La primera tendencia consiste en consolidar la apuesta de los mercados por los activos sostenibles. Al cerrar el tercer trimestre de 2023, ya habían recuperado el terreno perdido en 2022 las emisiones de instrumentos en deuda con atributos ESG, el repunte fue del 22%. Además, respecto a la industria de gestión de activos, nuevos productos sostenibles se han seguido lanzando a un ritmo de 44 nuevos fondos al mes. Respecto a los mercados emergentes, en ellos donde es necesaria una buena inversión en transición, se han desconectado de la correlación virtuosa ESG. Estos mercados deberían construir de nuevo una prima de valoración a los activos sostenibles como señal de recuperación.
Enfriamiento regulatorio en materia ESG con el nuevo ciclo político que se abrirá en Europa y Estados Unidos
La segunda de las tendencias que plantea Forética en su informe se basa en el posible enfriamiento regulatorio en materia ESG con el nuevo ciclo político que se abrirá en Europa y Estados Unidos. Según indica Forética: "En 2024 tendremos que prestar atención a las elecciones al Parlamento Europeo en junio y la estrategia de la nueva Comisión. También a las elecciones presidenciales en EEUU y sus consecuencias para la agenda de la sostenibilidad y la cooperación internacional. Una aproximación a la sostenibilidad basada en fortalecer la competitividad puede tener un impacto más profundo y duradero en el largo plazo".
Uso de la inteligencia artificial
Forética también pone el foco en el uso de la inteligencia artificial. La tercera de las tendencias apunta que esta puede mejorar y acelerar los impactos positivos de las políticas de sostenibilidad por las posibilidades infinitas de aplicaciones que ofrece. La IA será la principal protagonista de la agenda de sostenibilidad durante los próximos años.
Integración de la sostenibilidad en los organigramas corporativos
Esta nueva tendencia señala que el carácter híper especializado de los aspectos ESG ha generado nuevos perfiles profesionales y nuevas exigencias para las funciones tradicionales. El año 2024 será un año "para poner en valor la integración de la sostenibilidad a lo largo y ancho del organigrama y mitigar progresivamente los gaps entre oferta y demanda de talento".
Impulsar medidas de adaptación frente al cambio climático
La última de las tendencias habla sobre la importancia de adaptarse al cambio climático. Según indica Forética "Es importante comenzar ya a desarrollar estrategias de adaptación frente al cambio climático y aumentar los esfuerzos para movilizar la financiación necesaria. En este sentido, las acciones de conservación y restauración de la naturaleza y la actuación en los sectores clave se presentan como grandes oportunidades".