No cabe duda que los 'palos de selfie' están de moda, y cada vez se utilizan más en el día a día y en todo tipo de situaciones y lugares como museos, exposiciones y zoológicos.

Ahora, el zoo de Viena ha prohibido el uso de este artilugio en las zonas donde habitan focas y pingüinos ya que estos animales pueden, incluso, llegar a morder el teléfono, y esto puede provocar problemas para su salud. 

"Algunos de los animales son curiosos, pero otros tienen miedo, porque los animales no están acostumbrados a esta situación y nosotros queremos lo mejor para nuestros animales y, además, existe la posibilidad de que las focas muerdan el teléfono", explican desde el zoo.

Pero la medida no es general para este zoo, uno de los más antiguos del mundo, así se podrá utilizar en algunas partes que tienen barreras, las cuáles  crean la suficiente distancia entre los animales y los visitantes.

Para que a la gente no se le olvide, la dirección del zoo ha pegado carteles en las zonas restringidas para informar de esta prohibición.