Especialistas del Centro Tecnológico Forestal de Cataluña han propuesto involucrar a las comunidades locales en la planificación de prevención de riesgos de incendios con el objetivo de evitar que los fuegos se conviertan en "tragedias sociales".
Esto facilitaría, en gran medida, la asunción de responsabilidades, porque la sociedad civil, agricultores, ganaderos, empresarios locales y organizaciones ecologistas sabrían cómo actuar ante una situación de este tipo y comprenderían las razones por las que se toma una decisión.
Dentro de las medidas que proponen desde el Centro Tecnológico Forestal de Cataluña está la gestión forestal para retirar combustible de los montes, el pastoreo, la agricultura, las quemas prescritas y otras actividades agroforestales, como el aprovechamiento de la energía biomasa.
Además, para saber cuándo y dónde podrían producirse incendios en el futuro, los investigadores han hecho hincapié en que se conozca cómo las plantas, los animales y los fuegos interactúan.
El incremento progresivo del riesgo de incendios que estamos viviendo es resultado del cambio climático, según los expertos, además, han destacado que uno de los motivos que los provocan son las ciudades, que están llegando a las zonas boscosas donde no se ha retirado el combustible que propaga los fuegos, al igual que las plantaciones forestales para fines productivistas que pueden contribuir al aumento del riesgo de incendios durante épocas de sequías y altas temperaturas.
A pesar de que la imagen que tenemos del fuego es mala, no siempre es así. Muchas plantas y animales dependen del fuego, por este motivo sobreviven. Incluso, muchas veces, los incendios en dosis apropiadas incrementan la biodiversidad de una región. Este es el caso del escribano hortelano, una especie de ave que ahora está colonizando zonas calcinadas.
Por este motivo, los investigadores han pedido que se establezcan estrategias que integren los factores sociales, económicos y ecológicos para ayudar a proteger a las personas y sus bienes, además de saber cómo mantener los ecosistemas frente al irreversible cambio climático.