Tallar esta escultura de hielo, de 35 metros de alto y 20 de ancho, forma parte de 'Trumpmore', una iniciativa que pretende visibilizar que el cambio climático es real, algo de lo que siempre ha tenido dudas el presidente estadounidense como ha demostrado en públicamente en varias ocasiones. De hecho, hace casi un año, que Trump confirmó su intención de abandonar el Acuerdo de París.
"El calentamiento global es uno de los temas más importantes de la actualidad. Todavía hay personas que reflexionan sobre si se trata de un problema real", señala Nicolas Prieto, presidente de la ONG, en una declaración recogida por The Independent.
"Queremos construir el monumento para todos nosotros, para que podamos ver cuánto tiempo dura la escultura antes de derretirse", cuentan desde la organización.
Si el proyecto 'Trumpmore' recauda suficiente dinero, la ONG ha asegurado que instalarán una transmisión en directo de la escultura a medida que se derrita.