Con motivo de la cumbre 'Nuestro Océano', el presidente estadounidense ha subrayado que existen peligros como el cambio climático, la pesca abusiva y la contaminación, que amenazan el mar, por lo que ha decidido tomar medidas preventivas, "El mar es un paisaje fascinante y fuente de alimentación y de crecimiento económico", ha afirmado.
Obama explicó que usará su autoridad ejecutiva "para proteger algunos de los paisajes marinos" de EE.UU, sin especificar cuales. Mientras tanto, 'The Washington Post' se ha apresurado a asegurar que el presidente pretende expandir el área protegida alrededor de siete islas e isoltes, situados en el Pacifico Sur, entre las Marianas y Hawai. Actualmente están protegidos unos 225.300 kilómetros cuadrados de aguas en torno a esas islas y la propuesta de Obama ampliaría ese área protegida a más de 2 millones de kilómetros cuadrados en torno a cada territorio, según el diario.
Por otro lado, el presidente ya ha enviado instrucciones a las agencias federales para que emprendan nuevas acciones de lucha contra la pesca ilegal y la sobreexplotación de los mares, "El mercado negro de pescado constituye el 20% de la pesca, y supone unos costes anuales para las empresas pesqueras legítimas de unos 23.000 millones de dólares", ha afirmado. El objetivo de estas nuevas acciones es acabar con este tipo de prácticas, y construir un mercado legal y sostenible para la industria.
Sin embargo, Obama se puede enfrentar a la oposición de grupos pesqueros con intereses en las potenciales zonas protegidas, así como con los republicanos en el Congreso, que le acusan de abusar de su capacidad ejecutiva para llevar a cabo su agenda política.