La Policía ha detenido ya a dos personas por su presunta responsabilidad en la muerte de los animales en el parque, situado en la región de Mara y uno de los principales puntos turísticos del país.
Un total de siete leones murieron en un caso similar en el parque en 2015, mientras que otros once fueron hallados muertos en abril en el Parque Nacional Reina Isabel, en la vecina Uganda.
"Hemos podido detener a dos de los posibles responsables. Si son declarados culpables, se emprenderán acciones legales contra ellos", ha explicado el especialista en leones del TAWIRI Denis Ikanda.
Los cuerpos de los felinos fueron descubiertos en el parque el pasado 31 de mayo, tras morir por la ingesta de los restos envenenados de una vaca. Aunque el móvil del envenenamiento no está claro, podría tratarse de un acto de venganza por el ataque de los leones al ganado de residentes en aldeas de la zona.
"Hemos entrenado a gente que rodea los parques nacionales a lidiar con esas situaciones, porque los leones figuran entre las atracciones turísticas que aportan al país ingresos turísticos", agregó Ikanda.
El Parque Nacional de Serengeti, en el noroeste de Tanzania y fronterizo con Kenia, acoge más de 3.000 leones, una de las mayores poblaciones de ese animal en África. Ese parque, cuya continuación en Kenia es la también célebre Reserva Nacional de Masai Mara, es famoso por el fenómeno natural de la Gran Migración. Todos los años, entre los meses de junio y octubre, unos dos millones de cebras, ñúes y antílopes se desplazan entre el Serengeti y Masai Mara en busca de nuevos pastos, en uno de los mayores espectáculos naturales del planeta.