Los vecinos de Santurce, en San Juan, el principal distrito de la capital de Puerto Rico, llevan semanas acostumbrándose a que, de forma periódica, los monos visiten la zona en busca de alimentos. Algo que se ha convertido en un problema debido a los daños que causan en las cosechas y el riesgo que suponen para la salud pública.
Esta situación ha provocado que el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) movilice efectivos en las zonas donde se ha notificado la presencia de los primates.
Según publica El diario 'Primera Hora' los vecinos se hayan incrédulos y aseguran que nunca antes habían visto monos en el área. El avistamiento de primates en el centro de la capital se produjo el pasado marzo después de que los vecinos de Guaynabo, una de las principales poblaciones del área metropolitana de San Juan, informaran de la presencia de monos en sus propiedades.
Una plaga en el suroeste de la isla
En el año 2007, se declaró la presencia de los primates como una plaga en el suroeste de la isla y llevó a la puesta en marcha de una campaña de captura que se saldó con cerca de 2.000 ejemplares enjaulados.
Según algunas hipótesis barajadas por la prensa local, el origen de los monos en Puerto Rico podría remontarse a los ejemplares que llegaron, en la década de los sesenta, a la costa suroeste desde los islotes de Cueva y Guayacán, área suroeste, donde fueron usados para diferentes experimentos y su reproducción.
Los monos son una especie no autóctona de la isla, por lo que no existen predadores naturales en Puerto Rico que limiten su expansión. Y las especies que se encuentran presentes en esta zona son las de Mono Rhesus, Mono Patas y Mono Ardilla. Todos introducidos hace décadas con propósitos científicos.