Los distintos trabajos de recuperación y conservación del lince ibérico, que comenzaron en Andalucía el año 2011, han posibilitado ya la suelta de 214 ejemplares al medio natural, lo que permite recuperar la especie en la Península Ibérica.
2016 y 2017 han sido, hasta el momento, los años con mayor número de sueltas en el territorio peninsular. Con 48 y 40 ejemplares, respectivamente, se ha engrosado el número de animales trasladados al hábitat natural hasta los 214.
Una cifra que a lo largo de 2018 aumentará hasta los 245, debido a que la comisión de seguimiento del proyecto Life+Iberlince acordó, a finales del mes de noviembre, la reintroducción de otros 31 ejemplares, 16 machos y 15 hembras.
A partir de ahora, las tareas además se centrarán en propiciar las conexiones de las poblaciones de lince ibérico existentes en Andalucía con las creadas en los últimos años fuera de la comunidad para lograr un intercambio genético natural.
Este será el objetivo del nuevo proyecto europeo Life+Iberlince, liderado por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, cuenta con 22 socios, de dos países (España y Portugal) y cuatro comunidades autónomas (Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia), así como ONG y empresas privadas.