La comisión es un órgano participativo en materia de biodiversidad en el que están representadas la Administración General del Estado y las comunidades autónomas, según un comunicado del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).
El Miteco señala que hasta el momento tan sólo las poblaciones al sur del Duero estaban incluidas en el listado y las del norte eran consideradas en algunas comunidades autónomas como piezas de caza.
Con esta propuesta de inclusión de todas las poblaciones españolas de lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial se atiende al dictamen del comité científico, que recomendó su protección al considerar “su importancia como patrimonio cultural, científico, así como los servicios ambientales que produce la presencia de esta especie en los ecosistemas naturales”.
El hecho de que se trate de una especie clave para el funcionamiento de los ecosistemas, que su área de distribución abarque territorios de varias comunidades y que su número se haya incrementado en los últimos tiempos -ya hay ejemplares aislados también al este del Duero- así como las amenazas que afectan a la especie “hacían necesario un enfoque de actuación común”, según asegura el comunicado.
De esta forma se consigue que “la gestión y conservación del lobo que sea coherente en todo el territorio español, asegure sus poblaciones y distribución a largo plazo y garantice la coexistencia con el hombre”, indica el Miteco.
Tras la decisión de la Comisión Estatal, “se aprobará próximamente una orden ministerial por la que todas las poblaciones del lobo españolas queden incluidas en el listado”.
Asimismo, una vez resuelto el estatus legal del lobo, en la reunión de la Comisión Estatal para el Patrimonio Natural y de la Biodiversidad se ha propuesto la constitución de un grupo de trabajo para elaborar una nueva estrategia de gestión y conservación del lobo en España, que actualice la aprobada en 2005.
El objetivo de este documento será “lograr la conservación, gestión y restauración de poblaciones viables de lobos como parte integral de los ecosistemas españoles, a la vez que sea segura la coexistencia con las actividades humanas que se desarrollan en los territorios en los que habita”.