Gracias a los datos que aportan los trabajos de radioseguimiento que llevan a cabo la Consejería de Agricultura y el programa Life+Iberlince, se ha conocido que los linces que fueron liberados en Sierra Morena y los Montes de Toledo hace seis meses se han acomodado bien a sus áreas de reintroducción.

Las hembras, de nombre Kiki y Kiowa, se han dispersado muy poco en este tiempo aunque no es preocupante, ya que en general las hembras se desplazan menos que los machos. Por su parte, Kivu se ha desplazado más de 25 kilómetros hacia el norte por zonas donde los conejos de monte están muy presentes.

Otros ejemplares en Castilla-La Mancha están presentes en estas áreas de forma natural y se les sigue gracias al fototrampeo y los radiocollares. Este es el caso de los linces Huelva, Hispania, Krasti, Komino y Jarira.

Los últimos linces en ser reintroducidos fueron Kea y Kendo y proximamente le tocará el turno a Keres, Karma y Jabillo, otros tres ejemplares que serán liberados proximamente en Castilla-La Mancha.