Esta posibilidad, no tan remota, está fundamentada tras los casos, relacionados de mestizaje, entre osos polares y grizzlies.

"El cambio climático está provocando que los hábitats de las especies cambien y podría llevar a que una gran cantidad de especies estrechamente relacionadas entren en contacto", afirma la doctora Meade Krosby, científica investigadora del Grupo de Impactos Climáticos de la Universidad de Washington, en Estados Unidos, y autora principal de un estudio publicado en 'Nature Climate Change' que contabiliza el número potencial de dichos emparejamientos.

Los autores de este estudio detectaron que en América del Norte y del Sur, sólo el 6% de las especies relacionadas son propensas a entrar en contacto a finales de este siglo.
"Las personas se han preocupado de que el cambio climático estaría llevando a todas estas especies a contactar y que esto podría desatar una ola de mestizaje, explica Krosby. Encontramos que no es para tanto".

Los científicos analizaron 9.577 pares de especies relacionadas de aves, mamíferos y anfibios del Norte y Sur de América. Para los 4.796 pares cuyos hábitats de momento no se superponen, los modelos de ordenador muestran que sólo el 6,4% de ellos entrará en contacto debido al cambio climático para el año 2100.