El pleno de la Eurocámara aprobó este jueves una resolución que destaca que unos 1.300 millones de personas en todo el mundo (de las que el 84% vive en zonas rurales) no tienen acceso a la electricidad, y que cerca de 2.700 millones carecen de instalaciones adecuadas para cocinar, lo que provoca más de 1.400 millones de muertes al año.
El Parlamento Europeo ha instado a crear un "programa específico" centrado en conseguir el acceso universal a la energía para 2030, en el marco de la cooperación al desarrollo de la Unión Europea.
Para los eurodiputados, el acceso a la energía es "fundamental" para la consecución de muchos derechos fundamentales, por lo que los gobiernos deben promover su acceso universal a través de legislación, contratos o concesiones de licencias, o imponiendo obligaciones de servicio universal adaptadas a las posibilidades de cada país.
En concreto, proponen dar un trato diferenciado a los clientes en función de su capacidad económica, asignar subvenciones o fondos a categorías concretas de consumidores y a las zonas rurales alejadas, liberalizar la entrada de operadores en áreas sin servicio, impulsar una mayor eficiencia energética u otorgar incentivos fiscales para expandir infraestructuras.
Reclama que no se financie el uso de la nuclear
También instan a la Comisión Europea y a los países europeos a "que no financien ni alienten de ninguna otra forma el uso de la energía nuclear en los países en desarrollo, teniendo en cuenta los graves problemas de seguridad y sostenibilidad".
En ese contexto, la resolución subraya el enorme potencial de las energías renovables en muchos países en desarrollo para garantizar un suministro de energía sostenible y disminuir la dependencia de los combustibles fósiles, lo que reduciría la vulnerabilidad ante la fluctuación de los precios de la energía.
Sostenibilidad ambiental
Por último, los eurodiputados pidieron a la UE que fije orientaciones claras sobre los criterios de sostenibilidad ambiental para la financiación de proyectos de energías renovables.
Asimismo, solicitaron a la Comisión que imponga como condición prioritaria para el apoyo a nuevos proyectos energéticos el uso de energías renovables descentralizadas o de energía sostenible con bajas emisiones de carbono o una elevada eficiencia energética.