Una reducción drástica de alrededor del 60% que aproxima al país a los objetivos de la directiva europea recién aprobada sobre esta materia.

Pero esta disminución tiene tres razones fundamental que explican esta disminución: el cobro de la bolsa, las campañas de sensibilización y la apuesta por la bolsa reutilizable, según ha explicado Mayca Bernardo, portavoz de Cicloplast (entidad que impulsa el reciclado de los plásticos), y fuentes de la Asociación Española de Industriales de Plástico (Anaip).

El principal objetivo de la directiva, aprobada por la Eurocámara el pasado 28 de abril y que establece un objetivo de 90 unidades por habitante en 2019 y de 40 en 2026, es rebajar el consumo de las bolsas de plástico ligeras (menos de 50 micras de espesor).

El impacto de esta legislación europea en el sector industrial ha sido enorme y ha obligado a su 'reconversión' hacia el formato de las reutilizables, hace cuatro años la mayor producción era de las de un solo uso, subraya Bernardo.