El vivero de San Jerónimo será el encargado de tratar las semillas que se utilizarán para la reforestación de la zona afectada por el incendio que tuvo lugar en el Parque Natural de Doñana. Estas proceden de la primera actividad de voluntariado que se realizó en el mes de agosto, donde se recolectaron semillas de camarinas en el entorno de la Laguna del Jaral, para la restauración forestal.
En estos momentos, un grupo de científicos están estudiando qué plantas se van a sembrar para que la zona se diversifique con distintas especies que no favorezcan la virulencia de los incendios, que aumentan cada vez más con la subida de las temperaturas y la bajada de las precipitaciones por el cambio climático.
Entre las semillas que se están tratando en el vivero se encuentran las de enebros, sabinas, alcornoques, encinas, pinos piñoneros, tomillo, lavanda y helechos, algunos de éstos últimos de especies en peligro o vulnerables. La mayor parte de ellas se han recogido de plantas autóctonas del bosque mediterráneo y de los ecosistemas litorales.
Los expertos han confirmado que hasta otoño del año 2018 no comenzarán los trabajos de reforestación para esperar cómo reacciona el medio de manera natural y cómo se da la recuperación de las plantas que no han sido devastadas totalmente por el incendio. Además, han informado que van a contar con los más de 8.000 voluntarios inscritos en la web de la Consejería para ayudar a la recuperación ambiental de Doñana.