Pretenden generar una plataforma para apoyar el análisis riguroso de los recursos de agua y suelo, así como la gestión informada de la actividad agrícola y la conservación forestal por parte de las administraciones para hacer frente a los retos del cambio climático.
Junto a los dos grupos de investigación del I3A participan en el proyecto el Grupo de Erosión y Evaluación de Suelo y Agua de la Estación Experimental Aula Dei (EEAD-CSIC) y el Grupo Simulation and Data Laboratory Terrestrial Systems del Jülich Supercomputing Center (Alemania).
Se trata, según informa la Universidad de Zaragoza, de crear un modelo matemático que sirva de apoyo para planificar de forma eficiente las actuaciones que se llevan a cabo en el terreno para evitar la erosión después de un incendio forestal, establecer las áreas sobre las que actuar de forma prioritaria y las medidas más adecuadas a implantar para asegurar la recuperación de las zonas afectadas.
Esta línea de investigación, denominada Efhera (Enhancing after-Fire Hydrological and Environmental Recovery of Agroforestry zones), quiere facilitar la recuperación hidrológica y ambiental después de grandes incendios forestales (GIF) y engloba varios proyectos financiados por el I3A (Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón) y la Universidad de Zaragoza.
Las áreas forestales afectadas por grandes incendios sufren rápidos procesos de degradación en los meses inmediatamente posteriores al incendio debidos a las lluvias intensas, que provocan la pérdida de la capa de suelo fértil.
Y es que, las medidas de recuperación y manejo que se establecen no son correctas o no se llevan a cabo con la suficiente rapidez, la recuperación agroforestal del área puede llevar mucho tiempo o incluso no completarse, por lo que la plataforma computacional en la que trabajan permitirá evaluar de forma rápida en grandes extensiones de terreno montañoso, las zonas donde la erosión hidráulica será potencialmente mayor.
La plataforma de simulación hidrológica dará soporte a aquellos servicios y administraciones públicas que tienen que tomar las decisiones de actuación postincendio, con el fin de que las medidas de restauración de la zona quemada no se hagan sólo desde la experiencia de quien conoce bien el terreno, sino que se les aporten modelos computacionales que les faciliten esa labor con datos cuantificables, añade Martínez-Aranda.
Así, los grupos de investigación analizan cómo combinar imágenes de los satélites Sentinel y modelos computacionales hidrodinámicos para permitir el análisis de alta resolución de los procesos de erosión a largo plazo.
Podrán obtener información útil sobre la movilización del suelo, las trayectorias seguidas por el material sedimentario y las áreas de deposición, esenciales para el diseño inteligente de prácticas agrícolas y medidas de restauración para prevenir la pérdida de suelo.
La línea de investigación Efhera hace referencia a un escenario de cambio climático acelerado, donde este proceso de degradación postincendio ocurre cada vez con mayor rapidez. De ahí, la necesidad de implantar medidas de protección y recuperación en las primeras semanas o meses después de un incendio.