Las II Jornadas Acueducto de Segovia 'Una ciudad por y para un monumento' han servido para contar la situación del Acueducto de Segovia. Lo que más afecta a la construcción es la degradación de la piedra debido a la contaminación ambiental que acelera este proceso cada vez más. Ahora hay mayor contaminación en la atmósfera, más gases nocivos en el aire y el agua de la lluvia es más ácida (a causa de las emisiones de CO2) lo que erosiona los materiales de los que está formado el monumento.
Las vibraciones producidas por los eventos que se celebran cerca del Acueducto también le afectan, aunque no le afectan tanto como la contaminación ambiental o los cambios de temperatura, según los estudios llevados a cabo en los años 90 ha recordado uno de los expertos.
Por todo lo anterior, hay que buscar "nuevos productos de protección" para frenar esa aceleración confirmada en múltiples estudios. Ésta no es la primera vez que se toman medidas, para evitar la degradación del Acueducto a causa de los gases de los coches, hace 25 años se prohibió que pasasen los coches por el monumento.
El CEDEX que ha estado presente con la presencia de sus ingenieros José Manuel Gálligo e Ismael Carpintero es el principal encargado de cuidar el Acueducto gracias al convenio firmado con el Ayuntamiento de Segovia. Este organismo se ocupará de parar el deterioro de la piedra y de la realización de estudios estructurales y geotécnicos y efectos a largo plazo de los materiales que se usan para fortalecer la piedra.
