España vive en una sequía hidrológica y meteorológica con una reserva de agua en los embalses actualmente en el 39,9 % de su capacidad total, que tienen que ver con el uso que se hace del agua de pantanos y acuíferos en la primera, y en la segunda como consecuencia del cambio climático.
Una opción, según Alberto Fernández, técnico del programa de agua de la organización WWF, es optar por cisternas de agua para los baños con menor capacidad en vez de los catorce litros habituales, o reducir el riego de jardines, ya que el agua es un bien escaso y finito y en la mayoría de ocasiones se produce un derroche del recurso.
Sequía hidrológica y meteorológica
El consumo medio recomendable está en 170 litros al día por habitante, lo cual incluye agua para beber y servicios como la limpieza o la higiene personal, sin embargo, el problema viene en las casas con piscina.
En este sentido, la normativa ya exige que no se vacíe más de un tercio de agua de las piscinas, para eso, explica Fernández, pues es importante invertir en filtros de calidad.
Pero la mayor clave para ahorrar agua, dice, es restablecer el sistema de regadíos, porque hay una baja eficiencia en el uso del recurso, señala.
Consumo en la agricultura
Y es que el 70% del agua que consumimos para regadío se utiliza para hacer alimentos para piensos, para animales, no para alimentación humana,según Fernández, lo cual pone sobre la mesa la relación existente entre la industria cárnica y la sequía.
La apuesta en la productividad del viñedo, el olivar o el almendro, además, ha llevado a un aumento del riego en los cultivos de secano mediterráneos típicos.
Las restricciones hídricas de esta situación acaban afectando a la población, pues en muchos municipios se han ordenado cortes del servicio, como en localidades del sur de Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla y León y Cataluña.
Sin embargo, por la noche se pierde mucha agua por culpa de las fugas y no es la única situación alarmante. Actualmente está la del embalse de La Viñuela, la provincia de Málaga, que se encuentra superando sus mínimos históricos al situarse tan solo al 9,1 % de su capacidad.
La Viñuela abastece de agua a la comarca malagueña de la Axarquía, donde existe una amplia red de cultivos frutícolas tropicales de regadío como el aguacate o el mango, unos cultivos de regadío cuya reducción no afecta a la seguridad alimentaria, asevera Fernández.
Por otra parte, a nivel industrial también hay muchas medidas para la reutilización de agua, como la limpieza de vehículos o en la fabricación de botellas.
La Organización de las Naciones Unidas establece un consumo mínimo de 60 litros por habitante y día, pero lo habitual es llegar a los 120 litros o superarlos. No obstante, subraya el experto, que una forma justa de recuperar los costes del agua es pagar en módulos crecientes, es decir, si se gasta más de ciertos metros cúbicos se subirá el precio.
Dispositivos ahorradores de agua
Entre las medidas para el ahorro de agua, se encuentran la colocación de un reductor de caudal, un filtro que mezcla agua con aire, que permite reducir el gasto hasta en un 40% sin reducir la presión del grifo.
Asimismo, se recomienda el uso de las cisternas de doble carga en el baño de una casa, debido a que de esta forma existe la opción de cargar seis o nueve litros, dependiendo de las necesidades del momento o la compra de electrodomésticos eficientes, que ahorran hasta la mitad de agua con respecto a las convencionales.
Por último, en el caso de tratarse de una casa con piscina , además de usar filtros de calidad, es útil colocar una cubierta para evitar la evaporación de agua con el calor o la recuperación del recurso al lavarse las manos o en la ducha.