La Unión Internacional para la Conservación del Rinoceronte Africano (UICN) ha revelado nuevos datos que apuntan que el número de rinocerontes africanos muertos a manos de cazadores furtivos en África ha aumentado por sexto año consecutivo, con al menos 1.338 de ellos muertos en 2015.
Los cazadores furtivos han acabado con al menos 5.940 rinocerontes en el continente africano. Se trata del nivel más alto desde el 2008, año en el que comenzó a surgir la crisis, según señalan los expertos.
Mike Knight, presidente de la UICN, ha indicado que la “extensa caza furtiva para el comercio ilegal de cuerno sigue socavando los éxitos de conservación del rinoceronte realizados en África durante las últimas dos décadas.
Sin embargo, en los últimos dos años, según explica Knight, la caza furtiva ha disminuido en Kenia, y por primera vez desde 2008, el número de rinocerontes cazados furtivamente se redujo ligeramente el año pasado.
Expertos reunidos recientemente en Sudáfrica han explicado que la cifra de rinoceronte blanco parece haberse estabilizado en el continente, con unos 19.682 y 21.077 ejemplares.
Por otro lado, el rinoceronte negro, que se encuentra en la Lista Roja de Especies Amenazadas como en peligro crítico, ha experimentado una mejoría en 2015, entre 5.042 y 5.455 ejemplares, lo que representa una diferencia del 2,9% anual desde 2012.
El Parque Nacional Kruger es el hogar de la población de rinocerontes más grande del mundo. Sudáfrica posee al menos el 79% de los rinocerontes de África, aunque ha sido víctima de la mayor parte en la caza furtiva desde el 2008.
Los expertos han apuntado que la caza furtiva afecta de manera directa a los ingresos de los países africanos. Incluso, han concluido que los rinocerontes cazados ilegalmente en 2015, solo en Sudáfrica, representan una pérdida estimada en 25 millones de dólares.