La Reserva de Osos Panda de Chengdu en China, el principal centro de protección y cría en cautividad de estos animales, ha sufrido críticas durante los últimos días porque se ha filtrado en las redes sociales un vídeo que muestra a sus cuidadores maltratando a unos osos panda.
Los protagonistas del vídeo alegaron que uno de los pandas se comportó violentamente contra ellos cuando intentaban alimentar a varios cachorros, por lo que tomaron esas medidas en defensa propia. Según los expertos, estos animales se comportan así cuando reciben estímulos externos.
El proceso de investigación se va a iniciar en los próximos días y el director del zoo les ha pedido a los cuidadores que sean mas tranquilos en las respuestas a los animales porque muchas veces lo hacen simplemente por jugar.
China es el único hábitat natural de los pandas y cuenta con unos 2.100 ejemplares, de los que 1.800 viven en libertad y más de 300 en cautividad.
En septiembre de 2016, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza retiró a los pandas gigantes de la lista de especies en peligro de extinción para catalogarlos como una especie "vulnerable".