El lince nació esta misma temporada y los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación lo encontraron tras recibir una alerta del cadáver en la carretera JH 5002, conocida como la carretera de La Lancha, en el término municipal de Andújar, según informa el programa Life Iberlince.
Si se suma este felino, alcanzamos los 20 ejemplares de esta especie fallecidos por atropello durante 2018. Doce de ellos en Andalucía, cuatro en Castilla La Mancha, dos en Extremadura y dos en Portugal.
A parte, dos linces más murieron por distintas causas. En concreto, una hembra fallecida el 12 de abril en Valencia de las Torres, en Badajoz, cuyas circunstancias todavía se desconocen y un macho ahogado en el campo de golf de Matalascañas, en Huelva, el 11 de julio.
En 2017, hubo 31 atropellos de linces ibéricos en la Península: dieciocho en Andalucía, nueve en Castilla La Mancha, tres en Extremadura y uno en Portugal. Supuso el 53% de las muertes de esta especie el año pasado.
