Un estudio elaborado por el Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales de la Universidad Autónoma de Barcelona (ICTA-UAB) afirma que implantar el teletrabajo dos, tres o cuatro días a la semana puede disminuir las emisiones de dióxido de nitrógeno (NO2) procedentes del tráfico en un 4%, un 8% y un 10%, respectivamente.

La investigación ha llegado a esta conclusión gracias a datos obtenidos por las estaciones de la Red de Vigilancia y Previsión de la Contaminación Atmosférica del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) durante el periodo de restricción de movilidad con motivo del confinamiento por la Covid-19.

Basándose en el hecho de que el 85% de los trabajadores en Barcelona se dedican al sector servicios y que casi el 40% de los vehículos personales está relacionado con el trabajo, los investigadores han establecido tres escenarios sociolaborales diferentes mediante la implantación de dos, tres o cuatro días semanales de teletrabajo.

En el primer escenario se establece el teletrabajo durante dos días a la semana; en este sentido, las emisiones relacionadas con el tráfico disminuirían un 5%, donde el 4% se correspondería con los niveles de NO2.

Esto supondría una reducción de los desplazamientos laborales del 12,5% en caso de que el 20% de los empleados se acogiera a esta opción.

El segundo escenario presenta tres días de teletrabajo, lo que permitiría reducir las emisiones un 10%, donde el 8% se correspondería con los niveles de NO2; los desplazamientos por motivos laborales disminuirían un 25% en caso de que el 30% de los empleados adoptara esta medida.

Finalmente, el tercer escenario permitiría reducir un 15% las emisiones del tráfico, donde un 10% serían niveles de NO2, si el 40% de los empleados teletrabajara durante cuatro días a la semana, por lo que sus desplazamientos se verían reducidos en un 37,5%.

Además de esto, una situación de ‘bajo confinamiento’ propiciada por cuatro días de teletrabajo y un 15% menos de desplazamientos laborales, permitiría reducir el uso del vehículo privado en un 45% y disminuir un 25% de las emisiones del tráfico.